La justicia de los vencedores, al estilo iraquí
Saddam Hussein está muerto, pero no todos los iraquíes lo celebran. Por el contrario, la manera en la que los diversos grupos religiosos y étnicos en Irak respondieron a su ejecución es emblemática de la dificultad que implica mantener unido a Irak como una entidad coherente. Análisis de Shlomo Avineri en Expreso de Guayaquil
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