
Con claroscuros, Beijing aceptó el desafío de organizar los Juegos Olímpicos como una ventana para mostrar un perfil nuevo y moderno de China. Y logró exhibir enormes avances y esfuerzos. Pero también importantes deudas sociales. Reportaje de Alejandra Pataro publicado en
Clarinlea más
No hay comentarios:
Publicar un comentario